Lucha contra la básculaLlega el calor, la ropa ligera, los días de playa o piscina, y las ganas de salir más. Muchas mujeres y hombres se enfrentan en estos días al «reto del cambio de estación» en nuestro armario. Reto porque supone enfrentarnos a la gran pregunta: «¿la ropa del año anterior nos sentará bien?». Cuando vemos que aquellas prendas que llevábamos hace menos de un año ya no nos quedan del mismo modo tenemos varias opciones: comprar una talla más o reducir esos kilos ganados durante el otoño/invierno. Otro reto es el que supone comprar ropa nueva, probarte las prendas en un probador mal iluminado en el que te ves pálido y posiblemente poco en forma. No es casualidad que haya usado varias veces ya la palabra reto. Para aquellos que no tienen fluctuaciones de peso y que están felices con su forma física, todo esto puede parecer ridículo, pero aquellos que tienen una relación complicada con su cuerpo bien saben a qué me refiero.

Esta es una época de bombardeo constante en muchos medios sobre peso, dietas, cuerpos 10. Y no somos invulnerables a ello. Por eso ahora más que nunca debemos estar alerta ante los vendedores de humo, los que prometen resultados excepcionales en un tiempo brevísimo, las recetas mágicas. La llamada operación bikini no es más que una moda que pretende movilizarnos tarde para conseguir un «cuerpo ¿perfecto?» de cara al verano. ¿Te has abandonado este invierno?, ¿has comido de más y te has movido de menos?, ¿tus michelines son incompatibles con el microbikini o minibañador del año pasado?, no te preocupes, en un par de semanas bajarás el peso que te ha costado meses ganar. Y ahí comienzan las obsesiones contando calorías, el uso de sustitutos de comidas como barritas o sobres, el uso y abuso de productos light/0%/desnatados, el seguimiento de dietas milagro (de la alcachofa, de la piña, de las proteínas, de la zona…). En definitiva, un cambio de hábitos de alimentación que poco tiene que ver con lo recomendable. Tal vez la respuesta a esto no es la que uno desearía pero desgraciadamente no hay baritas mágicas, no hay pastillas milagrosas, no hay dietas infalibles. La adopción de hábitos de alimentación saludables y ejercicio físico moderado, adaptado a nuestras rutinas y estilo de vida es la única solución real para aquellos que quieran deshacerse de esos kilos de más. Con una mirada crítica no caigas en los reclamos de promesas imposibles. No es tarde, aún estás a tiempo, sé realista y cuida de tu cuerpo y mente.